El 15 de enero del 2018, Fallen From Heaven hizo su estreno en el tradicional clásico “Federico C. Prain” del Valparaíso Sporting, donde remató en un octavo lugar, con la conducción de Alejandro Maureira.
Nadie podría imaginar que desde ese día, el macho alazán -con su imponente marca blanca en su rostro-, podría ganarse el cariño de varios hípicos del país.
Para muchos fue la nueva esperanza que tuvo la región de Valparaíso para coronar a un nuevo campeón nacional.
Así lo fue demostrando con el pasar de su campaña, donde en su tercera salida salió de perdedor en el premio “Wacky II”, para luego empezar a soñar en grande. Los triunfos de orden clásico en el homenaje a Carabineros, El Estreno Nicanor Señoret y la Copa de Plata Italo Traverso, daban cuenta que estábamos ante nuestro campeón absoluto en Viña del Mar.
La sorpresa vendría con su golpe a la cátedra en el “Tanteo de Potrillos” del Hipódromo Chile, donde demostró que ese caballo “caído del cielo” iba a dar de qué hablar.
A pesar de que obtuvo el Nicolás Canessa Montt y el Gustavo Rivera en Viña del Mar, el campeón tuvo una decaída en su campaña, quedando sin oportunidad de ganar El Derby, algo que hubiese coronado el sueño de sus propietarios y equipo de trabajo.
Fallen From Heaven se retiró de las pistas el pasado miércoles 17 de marzo, escoltando a su “sucesor” generacional: Dubai Key.
Hoy, tras haber pasado los días y estar con la mente más fría para escribir, hay que destacar el enorme trabajo del stud Anyelo Andrés, del turfman antofagastino Jimmy Rojas, quienes siempre confiaron en su regalón.
A sus preparadores Juan Belzú y Carlos Urbina, que lograron sacarle el “trote” necesario al alazán rey de Viña del Mar. Y como no mencionar a cada uno de sus jinetes, que lo trataron como a un rey en la pista: Rafael Cisternas, Alejandro Maureira, Jaime Medina, Héctor I. Berríos, Kevin Espina, Joaquín Herrera, Javier Guajardo, Jorge González, Luis Torres y Alberto Vásquez.
Comprendo que se van a quedar muchos nombres fuera de esta publicación, pero ellos sabrán todo lo que aportaron con el cuidado de este maravilloso ejemplar.
Ahora, “Fallen From Heaven” se ganó su merecido descanso siendo reproductor de futuros campeones para la hípica nacional.
Y muchos esperan que nuevamente tengamos a un “caído del cielo” viñamarino dando cátedra en los hipódromos de todo el país.
Adiós, Fallen From Heaven.
No te vamos a olvidar...
Comments